La habitación era cómoda, pero el acceso complicado sin ascensor.

Casa Soto es un lugar encantador. La ubicación es perfecta, en una calle tranquila pero céntrica. La habitación era amplia y cómoda, con calefacción perfecta. Enga la gerente fue increíblemente amable, ayudándonos con consejos sobre la zona y organizando el desayuno, que estaba delicioso y variado.

totalmente recomendable

Me encantaron las áreas comunes, decoradas con un encanto rústico y acogedor. La tranquilidad de los alrededores se siente como un verdadero refugio, perfecto para relajarse y disfrutar de la naturaleza.

Algunas sillas podrían ser más cómodas.

Mi veredicto en dos frases

Un desayuno excepcional que deleita el paladar, comenzando el día con pastel casero y mermelada típica. La atención al cliente es sobresaliente, haciendo que te sientas igualmente bienvenido y en casa.

1 Ubicación excelente
2 Atención excepcional
3 Desayuno variado

1 Acceso complicado
2 Habitaciones pequeñas

Desayuno abundante y variado.

El desayuno con pastel casero y mermelada típica fue el mejor inicio del día. Además, la atención del personal hizo que me sintiera como en casa.

la habitación era tan pequeña que encontrar espacio para mis maletas fue un verdadero desafío, además, las camas son tan blandas que casi me hundía en ellas. esperaba un tratamiento especial, como una mejora de habitación, pero claro, eso es demasiado pedir para este lugar tan 'exclusivo'. casi hubiera escrito una buena reseña, pero no pude.

La habitación era cómoda y tenía buena calefacción, lo que se agradece. La cama y las almohadas eran cómodas, aunque un poco pequeñas para mi gusto. El hecho de que el edificio sea antiguo le da un encanto especial, aunque esto también significa que los suelos crujen un poco, lo que puede ser molesto. Pero, en general, estaba muy limpia y bien decorada. Perfecta para descansar tras un día de explorar Vegadeo.

una experiencia mágica llena de amor y atención en casa soto, perfecto para disfrutar de la tranquilidad y el confort en la naturaleza durante 14 noches

Nos sentimos como en casa gracias a la atención increíble de Ena, Marina y Bárbara. El desayuno es un festín deleitable y los paisajes son espectaculares. Nos encantó explorar esta joya entre Asturias y Galicia. ¡Definitivamente regresaremos!

Ubicación ideal en una calle tranquila. Habitación espaciosa y luminosa, ¡perfecta para relajarse! Y Ena, la gerente, fue un amor ayudándonos en todo.

Eso sí, parece que las camas estaban listas para un duelo de lucha libre, ¡casi me caigo de lado!

Las habitaciones tienen un encanto antiguo, con suelos de madera que dan un toque acogedor. Disfrutar de la tranquilidad del entorno es un lujo, especialmente al abrir las ventanas y escuchar el murmullo del paisaje natural.

Sin embargo, la habitación no era muy amplia, lo que hizo difícil organizar las maletas. Las camas eran demasiado blandas para mi gusto, aunque en la buhardilla se puede fresquear un poco abriendo el velux, lo que podría no ser suficiente para otros que prefieren un sueño más firme. También, los suelos de madera crujen al andar, y esto puede resultar molesto para algunos.

recomiendo este lugar insistentemente para un viaje

Encantador hotel, acogedor establecimiento, con un desayuno excepcional que incluye productos frescos y de calidad, además de su ubicación tranquilamente céntrica que facilita la exploración de la zona, a solo 83 km del aeropuerto más cercano.

No veo nada que mejorar